El 50 aniversario de la cita no tendrá tramo espectáculo, se disputará en dos días y cambiará de ubicación la asistencia
El Rally de Ourense – Ourense Termal se acerca a sus Bodas de Oro. Cincuenta ediciones contemplan a la prueba decana del automovilismo provincial que este año tendrá coeficiente 1.2 al ser nombrada mejor rally del Nacional en 2016.
Ante los ojos de los miles de aficionados que cada año pueblan las carreteras de la provincia, pilotos y copilotos de gran nivel, coches que dificilmente volverán a recorrer los tramos ourensanos y una cultura de motor que garantiza la continuidad de un rally imprescindible ya en el panorama español.
Los próximos días 9 y 10 de junio, Escudería Ourense levantará el telón de una competición que estrenará formato y varios cambios a nivel estructural.
El más grande es la distribución de la carrera en dos jornadas. Todavía sin cerrar por completo, el rutómetro de la 50 edición del Rally de Ourense constará de 6 tramos a doble pasada (tres el viernes y tres el sábado) con un recorrido de más de 200 kilómetros contra el crono. En cuanto a las especiales, habrá cambios pero no llegará una revolución. La primera jornada comenzaría a media tarde del viernes, alargándose hasta bien entrada la noche, mientras que la segunda se iniciaría a primera hora de la mañana para terminar sobre las seis de la tarde.
Solo un cambio notable ya confirmado, no habrá tramo espectáculo en esta edición. Las obras en las instalaciones de Expourense obligan a buscar una localización alternativa para el parque de asistencia, por lo que este pasará a estar en el mismo lugar en el que se celebraba la especial apertura del rally, la Ciudad del Transporte de San Cibrao das Viñas.
Además, al no disputarse este tramo, la organización celebrará una ceremonia de salida, un acto que siempre reúne a cientos de espectadores.
La prueba también está buscando una localización alternativa para el podio y el reagrupamiento del mediodía. Ahora mismo la opción más real y que más satisface es el Jardín del Posío. A falta de las mediciones finales para conocer el espacio real del que dispondría la escudería, la zona central del conocido parque ourensano es la favorita. Además, esta opción evitaría tener que cortar el tráfico en ningún momento, tal y como sucedió el pasado año con la instalación en el Parque de San Lázaro aunque de no fructificar la primera opción podría recalar nuevamente en este emplazamiento.
Sí repetirá el shakedown de la prueba. Castro de Beiro volverá a ser el escenario del tramo de pruebas en la mañana del viernes. Una forma de rendir homenaje a una de las carreteras míticas en la historia del automovilismo ourensano.
Actos conmemorativos
Además, Escudería Ourense también quiere rendir algún tipo de homenaje a los pilotos históricos que hayan defendido los colores del equipo y a los ganadores de las 49 ediciones anteriores.
El Rally de Ourense se hace mayor, por delante una edición ilusionante.